"Tradition is nicht die Anbetung der Asche, sondern die Bewahrung des Feuers."
"La tradición no es la adoración de las cenizas, sino la conservación del fuego."
G. Mahler

lunes, 29 de febrero de 2016

1º BACHILLERATO CON ODISEO Y LOS FEACIOS

Esta vez hemos leído los cantos VI y VII de la La Odisea. Hemos reflexionado sobre la figura del héroe por los suelos, desnudo, sin nada,... Hemos vuelto a  ver lo que era para los griegos la hospitalidad. Y la importancia del nombre que Odiseo se calla durante versos y versos. Y Nausícaa: La mujer frente al antihéroe.


Y ahora la selección particular de los alumnos de 1º de Bachillerato.

CANTO VI DE LA ODISEA

«Ella, como una ráfaga de aire, se deslizó ligera hasta el lecho de la joven, se detuvo sobre su cabeza y le dirigió la palabra, tomando la figura de la hija de Dimante, renombrado por sus naves que era de su misma edad y a la que tenía gran caridad.»
Od.6.20-24 (Yadira Álvarez)

«Yo iré contigo también como compañera, para que enseguida lo dispongas, porque no vas a ser ya doncella mucho tiempo.»
Od.6.33-35 (Miriam Núñez)

(Habla Odiseo:) «¡Ay de mí! ¿A la tierra de qué hombres ahora he llegado? ¿Serán acaso soberbios y salvajes e ignorantes de los justos amantes de la hospitalidad y con un entendimiento piadoso? Hasta mí ha llegado un griterío femenino, de jóvenes muchachas. Tal vez de Ninfas, que habitan las escarpadas cumbres de las montañas y las fuentes de lo ríos y los prados herbosos. Tal vez estoy cerca de humanos dotados de palabra. Pero, ea, yo mismo iré a probarlo y verlo.»
Od.6.119-126. (Andrea Croitoru)

«Habló así, y el divino Ulises salió de entre los arbustos y arrancó con su mano vigorosa una rama espesa con que velar la desnudez de sus carnes. Y se apresuró, como un león montaraz que, confiado en sus fuerzas, camina a pesar de las lluvias y los vientos con los brillantes ojos ardiendo y se arroja sobre los bueyes, las ovejas o los ciervos silvestres, porque su vientre le empuja a acometer a los ganados hasta dentro de sus sólidos apriscos. Así se presentó Ulises en medio de las doncellas de hermosas cabelleras, tan desnudo como estaba, porque a ello le obligó la necesidad. Y les pareció tan horrible, sucio por la espuma del mar, que huyeron aquí y allá por la inclinada ribera. Y solo la hija de Alcínoo se detuvo, pues Atenea habia infundido valor a su espíritu y alejado el miedo de sus miembros. Y quedó sola frente a Ulises.»
Od.6.127-141 (Rosángela Reyes)

«Quedóse erguida ante él. Y Odiseo vaciló en que si suplicaría a la joven de bellos ojos abrazándose a sus rodillas.»
Od.6.142-144 (Alejandro Martín)

«Así a ti, mujer, te admiro y estoy asombrado, y siento un tremendo temor a agarrarme a tus rodillas.»
Od.6.168 (Sergio Tinaquero)

CANTO VII DE LA ODISEA

«La pera envejece sobre la pera, la manzana sobre la manzana, la uva en la uva y el higo sobre el higo.»
Od.7.120-123 (Alejandro Martín)
«Allí luego habrá de soportar todo cuánto su destino y las Parcas tejedoras le hayan devanado en su hilo, desde el momento en que lo diera a luz su madre.»
Od.7.196-198 (Yadira Álvarez y Sergio Tinaquero)

«Alcínoo, aleja de tu alma esos pensamientos. Yo no me asemejo a los inmortales que pueblan el ancho Urano, ni por mi aspecto ni por mi modo de ser, sino a los hombres mortales que vosotros sepáis más colmados de desdichas. A esos soy comparable con las mías, que no habrá gran dolor que pudiera relataros del que yo no haya padecido por la voluntad de los Dioses.»
Od.7.208-214 (Rosángela Reyes)

«Permanecí allí, aislado, siete años, aun cuando de continuo regaba con lágrimas mis atuendos, las ropas divinas que me diera Calipso.» 
Od.7.259-261 (Miriam Núñez)

«Y la deidad me infundió un sueño infinito.» Od. 7. 287 (Andrea Croitoru)

domingo, 28 de febrero de 2016

CULTURA CLÁSICA Y APS: GUÍAS DEL MUSEO ARQUEOLÓGICO NACIONAL

Hacía mucho que no había Cultura Clásica en el Miguel Catalán. Y ya que retomábamos la asignatura, queríamos unirnos con ella al gran oleaje del Aprendizaje y Servicio Solidario que mueve el Instituto cada año.
Así surgió a comienzos de curso este proyecto. Agradecemos a Paloma Cabrera, responsable de las Antigüedades Griegas del Museo Arqueológico Nacional, su ayuda, su disponibilidad, su recibimiento. Agradecemos a Mar Cruz, del Ayuntamiento de Coslada, siempre su apoyo y su inspiración. Agradecemos a Juan de Vicente, siempre sus consejos y su entusiasmo.
En clase ya habíamos estado conociendo los secretos de la Sala de Grecia del MAN. El día 16 de febrero tuvimos la suerte de verla y de ir haciéndonos físicamente con ella. Aquí os dejamos algunas fotos de aquel día. Muchas gracias también a María Jesús Jove por su compañía y su colaboración. ¡Seguimos contando contigo!







 Y con toda esa información, ahora estamos elaborando nuestra propia visita guiada. El proyecto tiene como objetivo acompañar a varios grupos de los centros de mayores de Coslada y San Fernando para que puedan ver la cultura griega antigua y el Museo Arqueológico Nacional desde la perspectiva de un alumno de 3º de ESO. El aula de proyectos del Miguel Catalán está a pleno rendimiento los martes y jueves en la hora de Cultura Clásica.


Los ordenadores se mezclan con los libros y los cuadernos.



El eje cronológico y el mapa del Mediterráneo antiguo, que hicimos en aquellas primeras semanas de curso, nos sirven siempre de referencia.


Ahora nos falta ultimar las presentaciones, diseñar dinámicas para nuestro publico, preparar los equipos y en unas semanas, de vuelta al museo... Os contaremos los detalles.

LAS HUMANIDADES Y EL APS EN EL MIGUEL CATALÁN: EL PODER DE LA MÚSICA Y EL MITO DE ORFEO

Este proyecto echó a andar desde principio de curso. El buen sabor de boca que nos dejó el Premio de la Sociedad de Estudios Clásicos a nuestro trabajo de Dido y Eneas, surgido de la colaboración del curso pasado entre Música y Latín en 4º de ESO, nos animó a embarcarnos en un nuevo proyecto y a sumarnos con él a la metodología de Aprendizaje y Servicio Solidario, tan presente y consolidada en nuestro Instituto. Muchos retos en la tarea. El primero, entrar en el mundo de la ópera y comparar tres obras de épocas diferentes (Orfeo de Monteverdi, del siglo XVII, Orfeo de Gluck, del siglo XVIII y Orfeo en los infiernos de Offenbach del siglo XIX), todas ellas con el nexo de unión del mito de Orfeo. El segundo, aunar el trabajo de los 21 compañeros de musica con los 5 que hacen Francés y solo comparten la clase de Latín. El tercero, empaparnos del mito de Orfeo y convertirnos en dramaturgos para transformar en una nueva representación el mito original y las versiones posteriores. El cuarto, crear nuestra propia versión, la del Miguel Catalán, en el siglo XXI, demostrando que el mito griego sigue teniendo tanta vigencia como el poder de la música. Y el último, pero no por ello menos importante, convertir en APS un proyecto de Humanidades, tan aparentemente lejanas ellas de la utilidad práctica, de la utilidad social. Llevamos ya mucho camino andado. Ya conocemos los textos clásicos y los libretos de las óperas. Ya estamos haciendo los guiones y las marionetas. ¡Y ya imaginamos delante de nosotros el público infantil recibiendo esta creación! Por ahora os dejamos unas fotos de  una de las sesiones de la parte manual: empezando a crear las marionetas que serán nuestros personajes mitológicos. Os iremos contando... Por ahora un lujazo trabajar con Isabel y con estos entusiastas chicos y chicas, que no deja de sorprendernos cada día. Gracias a todos.










domingo, 21 de febrero de 2016

LEEMOS EL CANTO II DE LA ENEIDA. ¿SEGUIMOS TEMIENDO A LOS GRIEGOS...?

Impresionante imaginar esa lanza clavada en el vientre del caballo y oír con Virgilio el eco de las armas que van a llenar de miedo, fuego y sangre las calles de Troya dentro de unas horas...



Releamos ahora juntos los pasajes seleccionados por los lectores de Latín I.

CANTO II DE LA ENEIDA

«A vosotras, llamas eternas, y a vuestro numen inviolable por testigos os pongo -dice-, y también a vosotros, altares y nefandas espadas de los que pude huir, y cintas de los dioses que llevé al sacrificio: permitidme romper los sagrados juramentos de los griegos, permitidme odiar a esos hombres y poner todo en claro, todo cuanto ocultan. Que ninguna ley de la patria me ata. Tú sólo mantén tus promesas y si, Troya, te salvas, respeta tu palabra si te digo verdad, si te entrego cosas importantes.» 
Vir.En.2.154-161 (Rosángela Reyes)

«Gira el cielo y del Océano sube la noche envolviendo en su brazo de sombra la tierra y el polo. »
Vir.En.1.250 (Andrea Croitoru)

«Era el tiempo en que llega el descanso primero a los hombres cansados y se nos mete dentro, gratísimo regalo de los dioses.»
Vir.En.2.268-269 (Miriam Núñez)

«Erguido sin piedad en medio de recinto, el caballo vomita guerreros y Sinón victorioso, insolente, incendios provoca.» 
Vir.En.3.325 (Andrea Croitoru)

«¡Ay, que en nada puede uno confiar contra la voluntad de los dioses!» 
Vir.En.2.402 (Yadira Álvarez)

«La única salvación para el vencido es no esperar salvación alguna.» 
Vir.En.2.354 (Sergio Tinaquero)

«"Adiós ahora, y guarda el amor de nuestro común hijo". Luego me dijo esto, me abandonó llorando y queriendo hablar aún mucho, y desapareció hacia las auras sutiles. Tres veces intenté poner mis brazos en torno a su cuello, tres veces huyó de mis manos su imagen en vano abrazada, como el viento ligera y en todo semejante al sueño fugitivo.» 
Vir.En.2.789-794 (Sergio Tinaquero)

martes, 16 de febrero de 2016

Odisea 4 y 5: el héroe, el destino, el viaje...

Hemos leído ya los cantos 4 y 5 de la Odisea en 1º de Bachillerato. Dejamos a Telémaco y nos vamos con Odiseo a la isla de Ogigia con Calipso. De allí debe partir por fin Odiseo por designio de los dioses... hasta que se entera Poseidón y decide que no es hora todavía de que Odiseo deje de sufrir. Poseidón, la venganza larga y duradera...



Veamos cómo acompañan a Telémaco y a Odiseo por los cantos 4 y 5 los lectores de esta clase...

CANTO IV DE LA ODISEA


«Así habló y con el alma destrozada lloré, reclinado en las arenas, pues mi corazón no quería vivir más, ni yo contemplar la luz de Helios.» 
Od.4.59 (Rosángela Reyes)

«¡Hijos amados! Ningún mortal puede competir con Zeus, cuyas moradas y posesiones son eternas!» 
Od.4.85 (Miriam Núñez)

«Pero si bien por todos me lamento y me acongojo muy a menudo, albergado en mi palacio, y unas veces me desahogo con llanto y otras lo contengo...» 
Od.4.100-102 (Yadira Álvarez)

«¿Sabemos ya, Menelao de divina alcurnia, quiénes entre los hombres proclaman ser estos que han llegado a nuestra casa? ¿Me equivocaré o hablaré con acierto? Mi animo me impulsa a ello. Pues afirmo que nunca he visto a nadie tan parecido, hombre o mujer (el asombro me domina al mirarlo), como este se asemeja al hijo del magnánimo Odiseo, a Telémaco, que él, su famoso padre, dejó en su casa a poco de haber nacido, cuando por mi, ¡cara de perra!, marchasteis los aqueos hacia Troya, promoviendo una guerra feroz.» 
Od.4.138-148 (Andrea Croitoru)

«Al punto vertió en el vino que bebían una droga que borraba la pena y la amargura y suscitaba olvido de todos los pesares.» 
Od.4.220 (Sergio Tinaquero)

«Y nosotros dos sentimos vivos deseos, excitados, de salir o de responder enseguida desde dentro.»
Od.4.281-283. (Yadira Álvarez)

«Excitó todas las furias de los vientos de varios rumbos, y con nubes recubrió a la vez la tierra y el mar.»
Od.4.295 (Alejandro Martín)

«Tras de haber hablado así, sumergiéndose en el mar, que encrespó sus olas, mientras yo caminaba hacia donde estaban nuestras naves varadas en las arenas. Y mucho se alborotaba el corazón mientras caminaba.»
Od.4.426-430. (Yadira Álvarez)

«Su corazón se había reanimado con el claro sueño que le había llegado en el profundo de la noche.» 
Od.4.840 (Alejandro Martín)


CANTO V DE LAODISEA 

«Avanzó luego por sobre las olas semejante a una gaviota que da caza a los peces en los tremendos repliegues del estéril mar y se moja en la espuma salada sus presurosas alas.»
Od.5.51-54 (Yadira Álvarez)

«Hallóle sentado en la playa, que allí se estaba, sin que sus ojos secasen el continuo llanto, y consumía su dulce vida suspirando por el regreso, pues la ninfa ya no le era grata.» 
Od.5.163 (Miriam Núñez)

«¡Ah, desdichado de mí! ¿Qué va a ocurrirme? Temo que la diosa no me haya engañado cuando me dijo que sufriría trabajos en el mar antes de arribar al suelo de mi patria, ya que sus predicciones van cumpliéndose. ¡Con qué nubes cubre Zeus el ancho Urano! El mar está alborotado, las tempestades de todos los vientos se ciernen desencadenadas, y se aproxima mi aniquilamiento definitivo. ¡Tres y cuatro veces felices los dánaos que murieron antaño ante la vasta Troya por complacer a los Atreidas! ¡Pluguiera a los Dioses que allí se cumpliera mi designio y hallase la muerte el día en que los troyanos me arrojaban sus lanzas de bronce junto al cadáver de Aquiles! ¡Entonces me hubiera hecho acreedor a honras fúnebres y los aqueos hubieran celebrado mi gloria! ¡Pero ahora mi sino es sufrir una muerte oscura!» 
Od.5.299-314 (Rosángela Reyes)

«Pero ni por ésas abandonó la balsa, aunque estaba agotado, sino que lanzándose a través de las olas se agarró a ella, y se echó en medio de la misma tratando de escapar al embate de la muerte.» 
Od.5.327-330 (Sergio Tinaquero)

«Ella se compadeció de Odiseo, que vagaba sufriendo pesares, y semejantes a una gaviota voladora surgió de las aguas.» 
Od.5.337-338 (Yadira Álvarez)

miércoles, 3 de febrero de 2016

LEYENDO LA ODISEA, 2ª ENTREGA

Cuando hemos comentado en clase las frases seleccionadas que publicamos en la entrada anterior, nos hemos dado cuenta de que ya se aprecian diferentes formas de acercarse a la obra, diferentes formas de leer la Odisea. Hay quien se está dejando llevar por la estética, por la palabra convertida en imagen. Pero a otros compañeros les está llamando más la atención el argumento, los personajes, el contenido...
Veamos en esta nueva entrega por donde han ido las lecturas del canto 3, acompañados, como Telémaco, por Atenea.
¡Que lo disfrutéis con nosotros!









CANTO III DE LA ODISEA

«Nueve asientos había, y en cada uno estaban sentados quinientos hombres, y se sacrificaban nueve toros.»
Od.3.8 (Miriam Núñez)

«Escúchame, Poseidón, tu que abrazas la tierra.» 
Od.3.55 (Sergio Tinaquero)

«Por esta causa llego ahora suplicante a tus rodillas, por si quisieras referirme la triste perdición de aquél, si en alguna parte lo viste con tus propios ojos, o si oíste el relato de algún otro viajero.»
Od.3.92-94. (Yadira Álvarez)

«Le suplicábamos al dios que mostrara un prodigio. Entonces él nos manifestó y nos indicó que cruzáramos por el medio del mar hasta Eubea, a fin de que por el camino más rápido huyéramos de la catástrofe.»
Od.3.173-175 (Andrea Croitoru)

«¡Ojalá así decidiera quererte y se cuidara de ti en su ánimo!»
Od.3.223 (Alejandro Martín)

«Has hablado, ¡Oh, anciano!, muy discretamente. Mas debéis cortar las lenguas y mezclar el vino, a fin de hacer libaciones a Poseidón y a los demás inmortales. Después nos iremos a nuestros lechos, pues es hora de dormir, que ya la luz bajó tras el horizonte, y no debemos continuar más tiempo en el banquete de los Dioses, sino recogernos»
Od.3.331-336 (Rosángela Reyes)

«Se hundía el sol y se ensombrecían todas las sendas.»
Od.3.497 (Sandra del Olmo)