"Tradition is nicht die Anbetung der Asche, sondern die Bewahrung des Feuers."
"La tradición no es la adoración de las cenizas, sino la conservación del fuego."
G. Mahler

martes, 15 de diciembre de 2015

V JORNADAS SOLIDARIAS MIGUEL CATALÁN: CAMBOYA. POESÍA CAMBOYANA VERSUS POESÍA LATINA



Resultado de imagen de u sam oeurEl jueves 17 comienzan las V Jornadas Solidarias del Miguel Catalán. En Latín II nos hemos acercado también a Camboya y hemos leído dos poemas del libro Sacred Vows del autor camboyano U Sam Oeur, nacido en 1936 y superviviente de los campos de trabajo de Pol Pot.  Los hemos comparado con el Epodo 2 de Horacio, el famoso Beatus ille del género de la lírica latina que hemos estudiado durante las últimas semanas. Estas son nuestras aportaciones:



Resultado de imagen de u sam oeur











POEMA LATINO de HORACIO en traducción en prosa de Vicente Cristóbal:

1. Dichoso aquél que, lejos de ocupaciones, como la primitiva raza de los
mortales, labra los campos heredados de su padre con sus propios
bueyes, libre de toda usura,
2. y no se despierta, como el soldado, al oír la sanguinaria trompeta de
guerra, ni se asusta ante las iras del mar, manteniéndose lejos del foro y
de los umbrales soberbios de los ciudadanos poderosos.
3. Así pues, ora enlaza los altos álamos con el crecido sarmiento de las
vides, ora contempla en un valle apartado sus rebaños errantes de
mugientes vacas,
4. y amputando con la podadera las ramas estériles, injerta otras más
fructíferas, o guarda las mieles exprimidas en ánforas limpias, o esquila
las ovejas de inestables patas.
5. O bien, cuando Otoño ha levantado por los campos su cabeza
engalanada de frutos maduros, ¡cómo goza recolectando las peras
injertadas y vendimiando la uva que compite con la púrpura,
6. para ofrendarte a ti, Príapo, y a ti, padre Silvano, protector de los
linderos! Agrádale tumbarse unas veces bajo añosa encina, otras sobre el
tupido césped;
7. corren entretanto las aguas por los arroyos profundos, los pájaros dejan
oír sus quejas en los bosques y murmuran las fuentes con el ruido de sus
linfas al manar, invitando con ello al blando sueño.
8. Y cuando la estación invernal de Júpiter tonante apresta lluvias y
nieves, ya acosa por un sitio y por otro con sus muchas perras a los
fieros jabalíes hacia las trampas que les cierran el paso,
9. ya tiende con una vara lisa sus redes poco espesas, engaño para los
tordos glotones, y captura con lazo la tímida liebre y la grulla viajera,
trofeos que le llenan de alegría.
10. ¿Quién, entre tales deleites, no se olvida de las cuitas desdichadas que
el amor conlleva? Y si, por otra parte, una mujer casta, cumpliendo con
su oficio, atiende la casa y a los hijos queridos
11. -como la sabina o la esposa, abrasada por el sol, del ágil ápulo-, enciende
el fuego sagrado del hogar con leños secos un poco antes de que llegue
su fatigado esposo
12. y, encerrando la bien nutrida grey en la empalizada del redil, deja
enjutas sus ubres repletas; si, sacando vino del año de la dulce tinaja,
prepara manjares no comprados,
13. no serán más de mi gusto las ostras del lago Lucrino, o el rodaballo o los
escaros -si tronando la tempestad en las olas orientales desvió algunos
hacia este mar-,
14. ni el ave africana ni el francolín jónico caerán en mi estómago más
placenteramente que la aceituna recogida de las ramas más cargadas de
los olivos,
15. o la hoja de la acedera, amante de los prados, o las malvas salutíferas
para el cuerpo enfermo; o que la cordera sacrificada en las fiestas
Terminales, o que el cabrito arrancado al lobo.
16. Entre estos manjares, ¡qué gusto da contemplar las ovejas que vuelven
rápidas al aprisco después del pasto, contemplar los bueyes cansados
arrastrando con su cuello lánguido el arado vuelto del revés,
17. y los esclavos, enjambre de la fecunda casa, colocados en torno a los
Lares relucientes!
18. Cuando el usurero Alfio hubo así discurseado, dispuesto a convertirse de
inmediato en labrador, recogió en los Idus todo su dinero, decidido a
renovar sus préstamos en las Calendas.

BUNG KRIEL (de U Sam Oeur)

(El lago donde las grullas se aparean)
Los arrozales se extienden más allá del horizonte
donde el agua relumbra danzan las palmas,
donde las garcetas y las garzas aletean tras los peces
y los búfalos de agua se embisten, gruñendo como gigantes.
Los perdedores salpican como barcos de vapor aguas arriba.
Mientras el viejo búfalo corteja a su hembra
un joven búfalo la monta rápidamente
pero el viejo búfalo lo embiste y lo aleja a cornadas.
En el aire,
los pájaros se lanzan a la sombra,
las libélulas se apresuran y caen,
y los saltamontes se agazapan en la hierba.
Niños y niñas se agarran ligeros
—algunos juegan a escondidas y gambetas
algunos cantan en los árboles,
otros se tienden en la sombra.
Cuando el sol traspasa el horizonte,
los pájaros se dispersan y vuelan
en ordenadas bandadas a sus nidos
y los pastores llevan el ganado al establo.
Cuando la oscuridad cae en el llano
insectos, salamanquesas y ranas acunan este reino.
Un millón de estrellas cae por doquier
y los campesinos se duermen en paz.


Este poema del autor camboyano U Sam Oeur nos ha recordado al segundo Epodo de Horacio. En los dos se hace referencia a la vida retirada, como se puede apreciar gracias a la ausencia de alusiones a la vida de ciudad. También se observa la tranquilidad que quieren transmitir ambos autores en los siguientes versos: ‘’Un millón de estrellas cae por doquier y los campesinos se duermen en paz’’ en el Bung Kriel y cuando Horacio escribe, ‘Ni ave africana, ni faisán de Jonia descienden en mi vientre con más gusto que olivas escogidas en las ramas del árbol.’’

Ambos poemas hablan de la fauna y flora de un espacio con un lenguaje bello. En Bung Kriel leemos ‘’Mientras el viejo búfalo corteja a su hembra’’ igual que en Beatus Ille se alude también a los animales: ‘Pero, en invierno, cuando Jove envía lluvias y nieves juntas, acosa al jabalí con su jauría a las abiertas trampas.’ Al contrario del Beatus Ille, el poema Bung Kriel, al principio, incluye una escena carnal entre dos animales: ‘’Mientras el viejo búfalo corteja a su hembra un joven búfalo la monta rápidamente pero el viejo búfalo lo embiste y lo aleja a cornadas.’’

En el Beatus Ille se hace referencia a un importante elemento de la naturaleza como es el agua con el siguiente verso: ‘’Un rumor de fuentes manantiales que invita a sueños leves’’, como en el Bung Kriel con: ‘’Los arrozales se extienden más allá del horizonte donde el agua relumbra danzan las palmas.’’



¡Los truenos en el este hacen el sonido traDOK!
los ancianos del pueblo cruzan los brazos y lloran
la hembra del cangrejo se arrastra hasta lo alto de la montaña para desovar
y la garceta blanca se mantiene escondida entre las cañas.
El árbol Bodhi da hojas aunque carece de raíces
la cobra incuba su veneno permaneciendo enrollada en su cubil,
los búfalos se ocultan para afilar sus cuernos
mientras el rey de los cisnes vuela en busca de un sitio para su nido.
Los petirrojos empollan los huevos bajo el árbol kongkea
mientras los negros cuervos llevan higos para regarlos en la tierra.
Todo el mundo los recoge y los conserva.
Después, se darán cuenta que estaban equivocados al hacerlo.
Las garcetas blancas de largo cuello hacen alarde
de que saben cuántos peces hay en el agua,
mientras las garcetas grises buscan comida en las ciénagas
disfrutando su vida muy discreta.
Aunque Sieha se pasea por ahí con un aire furioso
ellas siguen hartándose hasta el alba.
La tigresa sobrevive en su refugio en la selva,
se esconde en el momento apropiado,
y cuando los truenos retumban por todas partes
sale de su santuario para apagar las voraces llamas.
Aunque los toros y las garcetas blancas
parecen quererse en estos días,
como si fueran amigos íntimos
sus pensamientos son, de hecho, falaces.
Por otro lado, los tigres y las garcetas se mantienen separados;
nunca se encuentran.
Y cuando lo hagan
todas las naciones temblarán,
porque estos dos animales son feroces;
practican estrategias, tácticas y tretas;
ambos son poderosos
más poderosos que los rayos.
Ahora les pedimos que se levanten para contarlos:
¿de qué lado están?
¿están a favor de las garcetas, o son pro tigres?
Sólo aquellos que tienen visión pueden escoger bien.


En este segundo poema, también se observa el tópico del Locus Amoenus, el lugar ameno, haciendo referencia a un paisaje de campo con animales del mundo bucólico. Por lo tanto, su temática es una las cuatro aspiraciones del hombre del renacimiento (Tempus fugit, Locus Amoenus, Carpe Diem, Beatus Ille).

La crítica indirecta contra los ricos que se retiran solo en teoría al campo despegándose de la riqueza terrenal, se hace explícita en el poema de U Sam Oeur, referida más a países que a individuos en los cuatro últimos versos del poema:

“Aunque los toros y las garcetas blancas parecen quererse en estos días, como si fueran amigos íntimos sus pensamientos son, de hecho, falaces”

Pero también, al igual que en el poema camboyano, Horacio hacía una crítica a los conflictos entre grupos o pueblos al decir: “Dichoso aquél que, lejos de ocupaciones, como la primitiva raza de los mortales, labra los campos heredados de su padre con sus propios bueyes, libre de toda usura, y no se despierta, como el soldado, al oír la sanguinaria trompeta de guerra, ni se asusta ante las iras del mar, manteniéndose lejos del foro y de los umbrales soberbios de los ciudadanos poderosos.”

Para el autor camboyano, parece más sencilla la vida en el campo y atractiva. Era una nueva visión idealizada del campo con mucho énfasis en la naturaleza perfecta y tranquila. Con un abundante uso de animales con rasgos distintos y valores similares. En el poema camboyano predominan animales feroces

Aunque los toros y las garcetas blancas parecen quererse en estos días (...)

frente a las referencias en el Beatus Ille a los animales domésticos como la vaca, la oveja…



Es bastante impactante que con 2000 años de diferencia, los autores escribieran sobre temas similares perteneciendo a distintas culturas y épocas.